lunes, 22 de marzo de 2010

Día 49. Patrón de comportamiento.

Los humanos, bien lo sabemos, somos seres de costumbres. La repetición constante de actividades y condiciones nos brinda seguridad.
Inevitablemente para el grueso de la población humana, el hecho de cambiar súbitamente de modo de vida nos causa miedo, inseguridad, a veces pánico.

Tener una pareja y perderla siempre nos lleva a un estado de alerta causado por el miedo al futuro incierto.

El caso de la princesa no debe ser la excepción, se encuentra en una situación cómoda donde un romántico incondicional hace que su ego se mantenga estable.

Mis intenciones son obvias (no solo para mi), y como ella no tiene una idea de lo que pasará después del día 100, es muy probable que ni siquiera le preocupe mi condición de incondicional enamorado.

Estoy casi seguro de lo que pasará después del día 100, tristemente eliminaré toda forma de contactarle, y borraré mensajes y correos electrónicos de ella sin leerlos hasta que la costumbre de esa actitud se vuelva cotidiana en mí.

Ella se sentirá abandonada y muy extrañada por mi repentino actuar, pero después de unos días pasará. No buscará algún otro medio para contactarme, no vendrá a mi casa ni a mi trabajo, no mandará cartas a pesar de conocer mi dirección, no me llamará de números desconocidos para despistarme. No lo hará por que la gente no es así, no la gente común. La gente común no se toma moletitas más allá de las que son meramente indispensables. La gente no toma riesgos, quiere vivir normal, sin reocupaciones, sin sorpresas, sin alarmas. Toda la gente es así salvo algunas excepciones.

Sábado, no se sabe nada de ella. La he vuelto a invitar a salir y no obtuve respuesta.

Soundtrack: Radiohead, “No surprises”
http://www.youtube.com/watch?v=fUgMbKJu9ws
.

No hay comentarios:

Publicar un comentario